A estas alturas mucha gente en Euskadi sabe en qué consiste la Inspección Técnica del Edificio. Muchas edificios la han pasado ya. Sin embargo, en nuestra experiencia vemos necesario insistir en algunos conceptos que pueden evitar que pasar la ITE se convierta en una mala experiencia.
Asesorarse en tu administración local
Conviene tener una información, al menos mínima, antes de afrontar el proceso. Posiblemente tu Ayuntamiento disponga de información en internet sobre este tema. Por ejemplo, el Ayuntamiento de Bilbao tiene una extensa información online sobre la ITE. (Ir a la web) . También el Gobierno Vasco dispone de un portal específico, https://www.euskoregite.com/, donde puedes obtener toda la información necesaria. Y también, cómo no, en este blog.
Contrata a un profesional independiente y con experiencia
El primer aspecto es considerar la titulación del técnico a contratar. Puede ser Arquitecto o Aparejador. Son dos profesiones diferentes, con diferente formación y competencias. Valora lo que mejor os convenga.
También es importante contar con un técnico con experiencia. Ten en cuenta que la ITE es una inspección visual, por tanto la opinión del técnico, apoyada en lo que ve, pero también es sus conocimientos y experiencia previa, es determinante para la correcta valoración de los posibles daños.
Y, por supuesto, que sea independiente. Contratar a un técnico relacionado con una empresa constructora puede ocasionar conflicto de intereses.
Analice las ofertas y desconfíe de las gangas
El trabajo necesario para realizar una ITE requiere experiencia y dedicación. Hay que visitar el inmueble, en ocasiones más de una vez. Tomar datos y medidas, consultar el catastro, inspeccionar todo el edificio, utilizar en algunos casos medios auxiliares e instrumentos específicos, trabajar en el estudio elaborando la ITE, realizar el certificado o certificados de eficiencia energética (si en el edificio hay viviendas y comercios hay que hacer al menos dos), preparar las copias, registrar el dictamen en el Ayuntamiento (si así está convenido), etc. Y sobre todo, se requiere mucha experiencia para saber interpretar las patologías que se ven. La información que le va a dar la ITE es muy valiosa para el propietario del edificio: conviene valorarla y desconfiar de ofertas excesivamente bajas que pueden esconder falta de experiencia o de dedicación.
Considere hacer una pre-ITE
Si crees que en el edificio puede haber problemas que vayan a originar una ITE desfavorable, hacer un estudio previo puede ayudarte a planificar mejor las obras a realizar y evitar sorpresas desagradables cuando tengas la obligación de presentar la ITE. Recuerda que en ese momento empezarán a contar los plazos para resolver los posibles defectos.
Considere visar la ITE
El visado en el Colegio Profesional correspondiente, el de Arquitectos en nuestro caso, si bien representa un gasto extra para el propietario, supone una garantía de la capacitación del técnico para desarrollar el encargo. No es un trámite obligatorio, pero es una cuestión a valorar.
Colabore con el técnico
La ITE es un valioso documento para la conservación del edificio, con lo cual es conveniente que los propietarios se impliquen en ella: aporten al técnico toda la información de la que dispongan sobre el inmueble, las obras efectuadas, las patologías detectadas, facilítenle el acceso a todos los espacios del edificio, etc. Ayudará a obtener una ITE más completa y precisa.
Pida que le expliquen bien la ITE
El documento final del dictamen de la ITE no es en ocasiones todo lo claro que pudiéramos desear. Se trata de un documento normalizado generado por una aplicación informática en la que se introducen los datos, por lo que es interesante que el técnico le explique su contenido y los aspectos más importantes. En concreto, el dictamen, donde se recogerán las obras a realizar: no deben tener ninguna duda sobre en qué consisten esas obras, cuándo tienen que hacerlas, si necesitarán un técnico, etc. Exprima al técnico al máximo.
Si hay que hacer obras, cuente con un técnico
Si de la ITE se deduce la necesidad de acometer algunas obras, organícense. Si es una comunidad de propietarios, cree una comisión de obras. Si las obras requieren un proyecto y dirección de obra, pueden contar con el técnico que redactó la ITE. Gestionen todo dentro del plazo máximo para evitar posibles sanciones. Si las obras no requieren proyecto, no está de más contar con el asesoramiento de un técnico. Recuerde que una vez finalizadas, necesitará un informe de subsanación redactado por el técnico (el que redactó la ITE u otro).
Conclusión
Como conclusión, le recomendamos que no considere la ITE como un trámite innecesario, o un impuesto nuevo en forma de inspección obligatoria. Considere que un edificio o una vivienda suele ser uno de nuestros mayores patrimonios personales. La ITE contribuye a una correcta conservación del mismo, evita la depreciación del inmueble, etc. Piense en ella como una inversión. También en términos de calidad de vida.
Si tienes alguna duda, estamos a tu disposición para ofrecerte toda la información. Y si necesitas un presupuesto, consíguelo ahora mismo rellenando el formulario que encotnrarás en esta misma página.