Si bien en nuestros hogares el uso de luminarias LED es ya habitual desde hace unos años, en la comunidad de vecinos parece asumirse como fijo e inevitable el gasto de iluminación. Sin embargo, el ahorro que supondría el uso de luminarias LED en las zonas comunes permitiría invertir los recursos en otras mejoras que redunden en la calidad de vida de los vecinos.
Ventajas del LED
Son claras y conocidas las principales ventajas del LED (light emitting diode):
- Bajo consumo de energía. Es ña tecnología de iluminación con menor consumo del mercado.
- Ahorro económico. Se puede reducir la factura de iluminación en un 70%
- Mayor tiempo de vida. Alcanzan las 45.000 horas de uso.
- Menor mantenimiento que las bombillas tradicionales, es mucho más resistente a los encendidos y apagados.
- Poca emisión de calor, al transformar más del 80% de la energía en luz.
- Tiempo de encendido muy breve.
Elegir la bombilla LED adecuada para la comunidad de vecinos
El mercado de luminarias LED crece cada día, y seguramente encontraremos en el mercado la solución que necesitamos. Deberemos tener en cuenta en la elección:
- El casquillo de nuestros portalámparas, en el caso de que deseemos conservarlos.
- La temperatura del color, que va del cálido (2700ºK) al blanco o neutro (3000ºK)
- La potencia y consumo que mejor se adapte a las necesidades de iluminación de los elementos comunes.
- El grado de apertura, que afectará a la distribución de la luz.
Hacer números y empezar a ahorrar
Basta hacer unos sencillos números para conocer el ahorro de nuestra comunidad. Vamos a suponer una parte del edificio, el garaje, en el que existen, por ejemplo, 12 tubos fluorescentes convencionales de 48 W, que vamos a sustituir por tubos LED de 18 W.
Podemos optar entre sustituir también los portalámparas o modificar los existentes (eliminando el cebador).
Teniendo en cuenta el coste de ambos (5 € del convencional frente a 30 € del LED), la vida útil de los mismos (1 frente a 5 años), el cálculo nos dice que en 5 años habremos ahorrado 2.462 €, habiendo amortizado ya la compra de los nuevos LED a lo largo del primer año.
Con independencia de la exactitud del cálculo, vemos que el ahorro es importante. Se puede ampliar el detalle en este enlace.
Otras ideas
Además del ahorro que supone la propia luminaria LED, se deben tener en cuanta otros aspectos para sacar el máximo provecho a la instalación:
- Sectorizar correctamente la instalación: por zonas del garaje, por plantas de escalera, etc.
- Utilizar sensores de presencia, con sensores de luminosidad, en lugar de interruptores para el encendido.
- Evitar el uso de bombillas LED fácilmente extraíbles, que puede favorecer su robo en zonas comunes del edificio.
Otro capítulo para ahorrar energía en la comunidad será el ascensor, cuya eficiencia energética deberá considerarse cuando haga falta su sustitución. Pensemos que representa el 15% del gasto de energía de la comunidad, como término medio.
Sin embargo, no debemos olvidarnos de la iluminación de la cabina. Además de recurrir al LED, un temporizador de apagado de la misma puede suponer otro ahorro adicional.